Hola Observadores, había pensado escribir un poema, o acabar el año de este blog, con una última entrada un tanto más artística. Pues esa fue la intención, con la que di vida a mi pequeño rinconcito virtual. "Arte y opinión", ¿recordáis?, o, "la búsqueda de la sensibilidad, de alguien que tenia siempre, mucho que decir".
Pero, una vez más, ¡Cambio de planes!. Añadimos una paginita más al Diario-blog de María.
Bueno este año ha sido, yo creo, uno de los más dificiles de mi vida. Parece que pasara en un suspiro y sin embargo en mis hombros siento la carga de un siglo. Y es que, como pesan las horas ,que nos conllevan mucho esfuerzo, y pocos frutos.
He tenido tanto miedo, que pensé que jamás volvería a tener una ilusión. Y no me avergüenza decirlo ahora, porque ya... ya no lo tengo.
No soy una persona, como dirían algunos, en puridad, buena. Pues no son tan grandes mis acciones nobles. Pero me entristece enormemente saber y observar, que la mayoría de vosotros, tampoco ha tenido un buen año. Os aseguro que me entristece...
Seguramente algunos seguiréis sin trabajo. Otros estarán solos .Y yo me avecinaría a pronunciar, que a casi todos, nos va a costar hacer un buen balance, porque este año, con perdón, ha sido la re-ostia.
Pero alguien dijo alguna vez, que las penas compartidas, son menos penas. Y se que si rebuscamos nos daremos cuenta de que todo no ha sido malo. Y que al menos, en nuestro caso tenemos unos ojos, que mediante la lectura, nos transmiten consuelo.
No es importante, especialmente la fecha, podría ser año nuevo mañana, o dentro de un mes. Pero, afortunadamente, marcamos el ciclo de una etapa, para recordarnos a nosotros mismos que "las cosas pueden cambiar".
Se que me he extendido, así que los "cumplidos" lo pasaran fatal, jajajajajajajaja. Pero este es el blog del alma, de la desnudez de sentimientos, alma "chafulleira", como diría mi abuela, pero alma al fin y al cabo.
Así que yo, desde "María Observa", os animo a que despidáis esta etapa, si bien no, con el corazón lleno, con la mente abierta a nuevas esperanzas.
¡Feliz 2011!
María.