No se si nuestras vidas son ríos, pero se que debe de haber uno. Porque hay algo que nos separa, y personas que derivan en sus orillas.
Los veo avanzar, algunos despliegan sus velas en pos de la corriente. Otros hurgan entre las piedras de sus lindes. Y pasean sus noches, para sorprender a los cangrejos, danzando el baile de la luz de la luna.
Yo no se si nadar o ponerme a bailar, hay veces... que ni siquiera veo el agua...
Una fotografía muy interesante, bien elegida para la reflexión. Me ha gustado. Personas que se dejan arrastrar por la corriente enfrentándose a lo que está por venir y otros que luchan por nadar en contra, construyendo su propio camino. Algunos se sienten más seguros en la orilla, donde nunca sucede nada. Un saludo :)
ResponderEliminarAinhoa me alegra que te guste la imagen porque la trasteé yo con el photoshop, jajajajajajaja.
ResponderEliminarY bueno las orillas son testigos también de muchas cosas Ainhoa, supongo que también tendran mucho que contar. Un besazo amiguita.
Yo prefiero mirar la orilla desde dentro.
ResponderEliminarNo es mala opción, aunque a veces tampoco está salir a secarse al sol. :).
ResponderEliminarPrecioso lo de que si la vida es un rio, haya personas que ni vean el agua. Precioso texto Maria. Un abrazo.
ResponderEliminarComo decían los artistas de Fluxus: «Todo fluye».
ResponderEliminarLa cuestión, tal vez, no es tanto coleccionar aquello que permanece en lo efímero, sino en hacer que lo efímero trascienda para no diluirse en el intento.
En cualquier caso, es imposible no mojarse.
Un saludable abrazo y todos los besos que os hagan falta, princesa.
¡Así que la imagen te la curraste tu? ¡está genial! No, si aquí tenemos una artista de los pieces a las cabezas :)
ResponderEliminarY los ríos tienen eso, que están llenos de vida y la vida tiene eso, que hay multitud de colores.
En todo caso es un placer coincidir contigo en este río que compartimos.
Un abrazo
En las orillas hay vida...lo peor es dejarse llevar por la corriente
ResponderEliminarMuy chula la imagen,el rio de la vida donde nos llevará , mientras navegamos por el avanzando con la corriente...
ResponderEliminar# DDmx me alegro si te gusto compi, un besote.
ResponderEliminar# Xindansvinto, quizás también ayude encontrar algo que nos mantenga a flote. :). En cualquier caso lleneme un arcón bien grande de besos, por lo que pueda pasar. :).
# Ximo, hola bonito!. Pues si un 10 por ciento yo, y un 90 por ciento photoshop, jajajajajajaja. ¡Ya mejoraré!.
A mi también me gusta compartir estas aguas contigo. Te invitaría a un cafe en mi balsa, pero como no suelo tomar café, te invito a un gin tonic! XD. Besos.
# Noel totalmente de acuerdo. :)
# Thunder: ¿Has visto? jajajajajajaja. Si es que la tecnología es lo más, jajajajajaja. Me alegro te gustara. Un besazo gordo gordo.
Lo mejor.... pillar un río y subir contracorriente.
ResponderEliminarUn abrazo
hermosa, extrañaba leerte! ya luego vuelvo a mi país y tendré tiempo de de leerte mas seguido
ResponderEliminarcomo siempre, perfectas palabras,
un beso!
Baila baila! es as divertido!
ResponderEliminar# Sisco comparto tu idea, ya encontraremos un rio y a ser posible que acabe en cascada, jajajaja. Un besazo.
ResponderEliminar# Romiiiiii, y yo también te echaba de menos a ti. Tendrás miles de cosas que contarnos no?. Que sepas que aquí te esperamos con muchas ganas. Un besazooooo enormeeeeee.
Bailate el agua (nadas y bailas)
ResponderEliminarCreo que la tendencia es seguir la corriente, y nadar veloz tratando de ser el primero en llegar... no se sabe muy bien donde, pero lo importante es ser el primero... yo prefiero quedarme en la orilla, o navegar el río con tranquilidad sin importar el sentido, para así poder apreciar la belleza del entorno que puede encontrarse hasta en la más insignificante piedrita de la orilla.
ResponderEliminarLinda entrada.
Un abrazo
Si tuviera que elegir... Me quedo con el que se va dando cabezazos contra las piedras...
ResponderEliminar¡Un beso!
Bueno amiga linda pienso que si existe un río, a veces nado contra corriente arriesgandome pero el que no arriesga no gana ummmmm?
ResponderEliminarBella imagen y hermoso post...te envío un abrazote grande deseandote un bello inicio de semana...cuidate mucho ok?
# Mimi, siempre!. Muchas gracias por tu comentario. Un beso.
ResponderEliminar# Chica del espejo: muy buena idea, yo comparto el gusto con la fusión. Supongo que este sería un baile muy sonoro y muy divertido. Besos.
# Carlobito, tu comentario si que es lindo, es impresionante lo bien que entras. A veces parece que que expresaras lo que a mi misma me gustaria expresar. Como cantaba Sabina, "pero que manía tiene la gente de llegar veloces a donde nunca pasa nada". Mil millones de gracias.
# !¿Juancho ese que tipo de comentario es?! jajajajajajajajajajajajajaja. ¡Luego pretenderas que yo vaya a salvarte, cuando la hemorragia mate a los cangrejos!, jajajajajajajajjajaja. Desde luego eres unico e irrepetible. ¡Me encantas! jajajajajajajaja
Nadar, María, hacia donde sea, pero nadar. :-) La vida es un océano demasiado grande como para quedarse quieto. :-)
ResponderEliminarhttp://javicrespo.blogspot.com/
Precioso el texto que invita a reflexionar.
ResponderEliminarLa vida te da oportunidad de muchos estados, sin lugar a dudas todos hemos querido nadar contra corriente, intentando contruir nuestro propio destino, aunque quizás no hayamos quedado en el intento. Observar desde la orilla siempre te da otra prespectiva...
Un beso María
Yo me siento balsa llevada por una corriente violenta, ora en un río ora en otro. Para pasar de uno a otro camino, retomo mi situación condicional y condicionante de humano. Y luego me vuelvo balsa. Veo el cielo. El cielo es un reflejo del río, o al revés. La dualidad de la vida en un mismo aspecto. Ojalá exista otra balsa con la que hablar durante el azote de las corrientes...
ResponderEliminar# Heimdall muchisimas gracias por el consejo y bienvenido a nuestro mundo de miradas.
ResponderEliminar# Totalmente de acuerdo Grandolina :). Esperemos que hay muchas perspectivas. Otro beso para ti.
# Lo bueno de las balsas es que tambien disfrutan de las corrientes suaves del rio, cuando la quietud solo se ve interrumpida por el paso de pececitos juguetones. Gracias por tu visita compañero. Un abrazo.